
La planta de Ford Almussafes (Valencia) ve su futuro de otra forma después de que la automovilística estadounidense la eligiese para hacer coches eléctricos en detrimento de la alemana de Saarlouis. Sin embargo, la nueva era eléctrica acarreará una sensible reducción de las horas de trabajo en la fábrica, entre un 30% y un 50% menos, según explicó Martin Sander, director de la división de coches eléctricos de Ford (llamada Model e) en Europa, en un reducido encuentro con periodistas en el que ha participado CincoDías. Esto, a su vez, supondrá un recorte de plantilla que la compañía aún no ha detallado.
La división del negocio en dos
Model e y Blue. Ford anunció en marzo de este año la separación de su negocio en dos divisiones diferentes. Por un lado, irá el negocio eléctrico, con Ford Model e, y por otro el de combustión, con Ford Blue. La compañía hizo ese movimiento para “liderar esta nueva y emocionante era de vehículos conectados y eléctricos”, según palabras del presidente ejecutivo del fabricante estadounidense, Bill Ford. Para el consejero delegado y presidente de la automovilística, Jim Farley, esta operación servirá para “impulsar el crecimiento y la creación de valor de la compañía, lo que pondrá a Ford en posición de superar tanto a los fabricantes de coches tradicionales como a los nuevos competidores centrados en el coche eléctrico”.
Bolsa. Ante las preguntas de este medio, Sander ha negado cualquier posibilidad de que Ford saque a Bolsa Model e, para así generar más fondos con los que financiar el paso hacia el coche eléctrico de la compañía. “No está en nuestros planes”, afirmó el directivo.