El rápido encarecimiento de la deuda está obligando a las empresas a afinar al máximo en sus programas de financiación. Las corporaciones se anticiparon al cambio de rumbo en la política del BCE e hicieron buen acopio de liquidez el pasado año. Pero el alza de tipos está siendo mucho más veloz de lo previsto y está llevando a algunas compañías a lanzar recompras de bonos con las que optimizar esa liquidez. Mejor recomprarlos que seguir pagando el cupón a la vista de que los tipos seguirán subiendo y financiarse será bastante más caro. Más aún si la posición de caja de la compañía es holgada.
Las opciones para el exceso
de liquidez
Retribución. La recompra de bonos es una alternativa para rebajar apalancamiento en las compañías con excedente de liquidez. Sin embargo, el alza de tipos de interés también plantea a las empresas un nuevo escenario, el de la remuneración por parte de la banca de sus depósitos. Los depósitos de empresas han dejado de estar penalizados a intereses negativos y en julio se pagaban a un tipo medio del 0,11%. Ahora la tasa de depósito del BCE ha subido al 0,75%, lo que augura una mayor retribución.
Caída de emisiones. “Habrá emisores que prefieran mantener su liquidez intacta”, señala Chambel, que destaca que las compañías españolas parten de una buena posición de caja gracias a las emisiones de 2021. De hecho, el volumen de colocaciones de deuda de corporaciones españolas ha caído con fuerza en lo que va año, el 64% interanual. Mucho más que el retroceso del 31% en las emisiones corporativas en el año a nivel europeo.